Caro Quintero reveló datos escalofriantes del gobierno. Varios Presidentes involucrados
Rafael Caro Quintero, reconocido como “El Narco de Narcos”, fue entrevistado recientemente por la Revista Proceso, y por primera vez reveló escalofriantes secretos del Gobierno Mexicano.
La entrevista se realizó de manera clandestina, ya que actualmente se encuentra prófugo. El gobierno de Estados Unidos ofrece una recompensa de 5 millones de dólares por información que lleve a su captura y el Gobierno de Mexicano lo acusa de reincorporarse al tráfico de drogas y de desatar una guerra contra el Cártel de Sinaloa.
Antes de comenzar la entrevista se tomó unos minutos y le pidió perdón a todos los mexicanos.
Caro Quintero nació el 3 de octubre de 1952 en el rancho La Noria, en Badiraguato, Sinaloa. Asegura que se dedicó a la siembra de mariguana porque “de alguna manera había que sobrevivir” y aprovechó para aclarar: “No estoy en guerra con nadie; El Chapo y el Mayo son mis amigos”.
Después de haber permanecido en prisión por más de 28 años, en agosto del año 2013 fue puesto en libertad. Pero solo unos días después la Procuraduría General de la República recibió dos órdenes de aprehensión en su contra: Una para extraditarlo a Estados Unidos y otra para cumplir una condena de 12 años de cárcel, que según autoridades mexicanas le quedaron pendientes.
Parece increíble que haya aceptado la entrevista y que además fuera videograbada, pues recordemos que se trata de uno de los capos de la droga más poderosos en la historia, pero el lo dijo con sus propias palabras: “Llegó el momento de que el pueblo conozca toda la verdad”
“Es tiempo de decir la verdad, los mexicanos tienen derecho a saber que durante los últimos 40 años han sido engañados por el Gobierno y todos los políticos. La venta de droga es uno de los mejores negocios que hay, y todo los gobiernos gozan de sus ganancias y de todos los beneficios que da”.
“Iniciando los años 80 junto con mis compadres Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Carrillo Fonseca iniciamos el cártel de Guadalajara, y en solo unos meses nuestra organización creció mucho, pues ya estábamos controlando el traspaso de Mariguana y Cocaína con rumbo a los Estados Unidos. Gracias a un arreglo que hicimos con Juan Matta-Ballesteros, uno de los líderes del Cártel de Medellín, ellos nos vendían la Cocaína. Era tanto el dinero que teníamos en ese momento que ya ni siquiera podíamos esconderlo, fue cuando empezaron las balaceras con la policía y el ejército, estábamos en guerra contra el gobierno. Hasta que un buen día me hablaron de parte de la oficina del Presidente López Portillo, quería reunirse con nosotros para hablar de lo que estaba pasando. Días después lo vimos en la parte alta de la sierra de Durango, llegó con un grupo de hombres bien armados y solo platicamos a lo mucho 10 minutos con él, lo primero que dijo fue “Las balaceras y muertes se acaban hoy, pueden trabajar libremente porque nadie los va a perseguir, pero de ahora en adelante el gobierno recibe una parte de las ganancias”. A partir de ese momento vivimos muy tranquilos, hasta quise pagar la deuda externa, pero no me dejaron. Pero lo importante y que todo el mundo debe saber, es que por más de 7 años le entregamos miles de millones de dólares en efectivo al Presidente. Hasta nos invitó a sus fiestas privadas, yo estuve una vez cuando dio el grito en un 16 de septiembre. Nadie me vio, pero esa vez cenamos juntos.”
“Todo iba bien hasta que llegó el nuevo presidente Miguel de la Madrid, el nos volvió a declarar la guerra porque Estados Unidos también quería su parte de las ganancias y nosotros no aceptamos, paso lo de Camarena, a quien yo no maté y poco a poco fuimos cayendo todos”.
“A Estados Unidos no le gustó que los mexicanos ganábamos dinero vendiéndoles droga, por eso acabaron con nosotros, porque no aceptamos regalarles nada”.
